miércoles, 24 de octubre de 2012
Túnicas Negras
El 27 de septiembre 1540 en Roma, la Sociedad de Jesús -una organización de misioneros católicos romanos- recibieron su carta constitucional formal del Papa Pablo III. Ignacio de Loyola, un soldado español que se convirtió en sacerdote, fundó la Sociedad en 1534. Imprescindible en la Contrareforma del Siglo XVI, los misioneros jesuitas empezaron a actuar fuera de Europa en el siglo XVII. Las “Túnicas Negras”, así conocidos por los nativos en América, a menudo precedían a las naciones europeas en su infiltración por tierras y sociedades extranjeras. Sin embargo la vida de un misionero jesuita estaba en peligro porque las autoridades extranjeras eran hostiles y reacios a sus tareas de conversión; los perseguían hasta darles muerte. Sin embargo, en otras naciones como India y China, les veneraban como hombres de sabiduría y ciencia.
Tratado de Westfalia
El 24 de octubre 1648 Se firma el Tratado de Westfalia, que puso fin a la Guerra de los Treinta Años y haciendo que el equilibrio de poder en Europa cambiara radicalmente. La Guerra de los Treinta Años, guerras combatidas por varias naciones europeas, fue provocada en 1618 por los esfuerzos del rey de Bohemia para imponer el Catolicismo a lo ancho y largo de sus dominios territoriales.
Los nobles protestantes se rebelaron y en 1630 casi toda Europa se encontraba en guerra. Como resultado del Tratado de Westfalia, el Santo Imperio romano se disolvió, Suecia ganó el dominio del báltico, la independencia de los Países Bajos fue reconocida totalmente por España y Francia se reconoció como el poder occidental preeminente.
La guerra había devastado Europa, sobre todo Alemania donde los mercenarios que había luchado como soldados y que no habían cobrado por sus servicios en la guerra se dedicaron a asolar ciudades, pueblos y granjas.