Rey de Suecia desde 1751 hasta 1771, se dice que tenía un apetito voraz, y eso fue lo que le llevó a la tumba: su última cena se basó en langosta, caviar, chucrut, champán y un suculento postre de semla con leche. Repitió el postre 14 veces. No pudo acabar vivo la digestión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario